martes, 24 de enero de 2012

Breña Alta

Siempre que he querido quedarme en algún sitio, había detrás una mujer. Y no hablo de ahora: ni de la juventud ni de la madurez. En eso debí ser muy precoz. Pero si pienso en las mujeres canarias, me cuesta.

No es tanto que me cueste, como que todo ha quedado oscurecido. Mi cuerpo herido y todo oscurecido.

Hay un tercer vértice: Breña Alta o La Breña, “si no se especifica es siempre Alta”, en la isla de La Palma, tierra de tabacos y de volcanes vivos: la isla bonita y tierra de mujeres hermosas.

Mi cuerpo herido, sombras que relativizan todo y la isla de La Palma.